Quien siente la vocación a la vida religiosa, debe responder lo antes posible, como enseñan los santos. El enemigo del género humano (o sea el diablo) cuando se da cruenta que una persona es atraida a la vida consagrada, intenta hacerle cambiar de idea por todos los medios. Entre las tentaciones principales está la de convencer al joven “llamado” a retrasar la entrada en el monasterio, y mientras tentarlo sin tregua para hacerlo caer en pecado (sobretodo en pecados contra la pureza), hasta que el joven pierda la vocación.
Si un joven con vocación tiene un serio impedimento (por ejemplo tiene que cuidar sus padres enfermos), en este caso está justificado en retrasar la entrada en la vida consagrada. Pero si no tiene una verdadera justificación, ¿porqué motivo debe continuar estando en el mundo? Los grandes doctores de la Iglesia como Santo Tomás de Aquino o San Alfonso María de Ligorio, afirman que es necessario responder con prontitud a la vocación divina, porque de otro modo el Señor podría retirar la llamada del joven que demora.
¡Ay de aquel que pierde la vocación! Santa Teresa de Lisieux prefirió renunciar a un viaje a Tierra Santa para no retrasar algunas pocas semanas la entrada al monasterio de clausura. ¿Quién sabe?, no podemos excluir que si hubiera realizado aquel viaje, podría haber perdido la vocación y se hubiera condenado. Cuántos jóvenes han perdido la vocación por haber retrasado su entrada en el convento y han vivido de modo pervertido el resto de su vida!
Si un joven o una joven siente la atracción por la vida consagrada debe escribir o contactar algún monasterio de estricta observancia para poder hacer un retiro espiritual para discernir y confirmar su vocación. Una vez confirmada la llamada del Señor, no debe demorarse, sino que apenas posible debe cumplir la voluntad de Dios. ¿Porqué arriesgarse inutilmente demorando sin motivo grave? En el mundo hay tantos peligros para el alma, sería insensato querer permanecer en el siglo aun teniendo vocación. ¡Quien sabe, si este no es el último llamado para alguien que está demorando desde mucho tiempo!